domingo, 12 de septiembre de 2021

Odonatos: Morfología y su papel en el ecosistema.

 La orden de los odonatos existe cerca de 5000 especies de odonatos repartidas por todo el mundo. Se trata de insectos muy antiguos cuyos antepasados de gran tamaño ya volaban en el Carbonífero medio, hace mas de 300 millones de años. Son animales predadores tanto en su fase adulta como en la larvaria, y su extraña anatomía está perfectamente adaptada a la zaca. Los adultos son amantes del sol, y mas abundantes y diversos en las zonas tropicales. En la Península Ibérica viven unas 80 especies de las 120 conocidas en Europa y la cuenca del Mediterráneo. Son insectos heterometábolos, con larvas acuáticas y adultos terrestres.

Morfología.

Los odonatos actuales son generalmente de tamaños medios y grandes, hasta unos 15 cm. de longitud o envergadura alar. Suelen ser de colores llamativos, algunos metálicos. Toda su anatomía está modificada por su régimen predador. Así, la boca es masticadora y dotada de fuertes mandíbulas que dan nombre al orden (odontós: diente ; gnathós: mandíbula). Sus ojos son enormes, para localizar sus presas, y a veces cubren casi por completo la cabeza. Por el contrario, las antenas están muy poco desarrolladas, ya que no usan el olfato para cazar.

El protórax es pequeño, mientras que los otros dos segmentos torácicos son muy grandes y están inclinados hacia atrás, lo que acerca las patas a la boca y dirige las fuertes alas lejos de la cabeza. El gran desarrollo de este tórax se debe a que alberga la potente musculatura del vuelo. Sus patas no sirven para caminar, aunque si se pueden agarrar con ellas a alguna presa. Están cubiertas de pequeñas espinas que se enganchan a las presas en vuelo o evitan que se escapen.

Las alas de los odonatos están entre las mas perfectas de los insectos. Conservan algunas características primitivas y su articulación alar les limita los movimientos, pese a lo cual han desarrollado su capacidad voladora de forma sólo comparable a la de los Dípteros.

Ningún otro insecto es capaz de realizar sus vuelos en picado, o sus cambios radicales en dirección. Cada una de las alas puede batir independientemente, lo que permite quiebros y cambios sorprendentes. Las alas están cubiertas de una venación muy numerosa y poligonal. Cerca de su ápice aparece una celda de diferente color, el pterostigma, con una función mecánica fundamental para el vuelo.

Los odonatos se dividen en dos subórdenes fácilmente distinguibles, Zygoptera y Anisoptera. Los Zigópteros son los caballitos del diablo.

Ejemplar de caballito del diablo. Calopteryx virgo


sábado, 4 de septiembre de 2021

Coleópteros: morfología, reproducción y papel en el ecosistema.

 El orden Coleptora, los coleópteros o escarabajos, son el grupo animal más numeroso que existe en el mundo. Se conocen mas de 300.000 especies, lo que supone el 30% de la fauna mundial conocida. 

En la Península Ibérica se han catalogado hasta ahora cerca de 11.000 especies y tambien aqui las cifras reales deben ser superiores. Es muy conocida la anécdota entre el arzobispo de Canterbury y el famoso biólogo evolucionista J.B.S. Haldane. "¿Qué le dicen sus estudios sobre la naturaleza del Creador?", a lo que éste respondió "Que sin duda tiene una afición desordenada por los escarabajos".

Hembra de Lucanus cervus (Lucanidae)

Macho de Lucanus cervus (Lucanidae)

Morfología.

Los coleópteros suelen reconocerse facilmente debido a que su primer par de alas (élitros) se han endurecido, formando una especie de estuche o coraza resistente e impermeable que cubre el abdomen, protegiéndolo así como al segundo par de alas que son membranosas. Los élitros no sirven para volar, por lo que el animal los separa hacia los lados y vuela con el segundo par de alas. La existencia de estos élitros es la característica que ha permitido el éxito evolutivo de los coleópteros; de hecho, el resto de su estructura muy poco evolucionada. Bastantes especies han perdido la capacidad de volar: algunos conservan las alas membranosas posteriores pero no son funcionales al haberse atrofiado la musculatura alar, en otros han desaparecido las alas membranosas, y en algunos los élitros se han soldado entre sí.

Los adultos conservan la boca masticadora primitiva, inmodificada a pesar de la gran variedad de alimentos que son capaces de tomar. Aunque algunos incluyen en su dieta sustancias líquidas como el néctar, la savia u otros jugos, la inmensa mastican su alimento. Las diferentes especies pueden alimentarse tanto de vegetales como de animales, ya estén éstos vivos, muertos o en descomposición; algunas incluso comen excrementos o madera muerta.