sábado, 10 de noviembre de 2018

Esfinge colibrí.

Comenzamos el mes de noviembre con la esfinge colibrí ( Macroglossum stellatarum).

Muchas mariposas nos sorprenden por sus colores, por su belleza, y otras por su forma. Y en algunos casos por su rareza, en esta oportunidad hablaremos de una mariposa que es todo este conjunto en una sola.

Este es el caso de la esfinge colibrí o mariposa colibrí (Macroglossum stellatarum) una mariposa que si bien no destaca por una fascinante coloración, si lo hace por sus hermosas características y comportamiento


Estos lepidópteros viven comúnmente en el sur de Europa, lo que incluye la Península Ibérica, el norte de África y el centro de Asia, también la India e Indochina. El nombre por el que comúnmente se la conoce se debe a su vuelo y la forma en la que se alimenta, también por la forma de su cuerpo, todo semejante a un colibrí.



Al momento de alimentarse, estas mariposas baten las alas rápidamente, a un ritmo de 72 a 85 veces por segundo, mientras se alimenta exclusivamente del néctar de las flores. Esto es un dato bastante particular, ya que otras especies de mariposa no sobrepasan los 12 aleteos por segundo.
Al igual que muchas mariposas, se alimentan de algunas especies de planta en concreto como lo son las Violas, las Prímulas y las Verbenas. Para alimentarse, extienden su espiritrompa, mientras vuelan, y la dejan caer sobre la flor donde empiezan a libarla, el tamaño de esta es casi de la misma longitud de su cuerpo, su manera de extenderla es muy parecida al del camaleón, ya que las tienen que desenroscar de su cuerpo.
Debido a estas características, es muy importante observar cuidadosamente a sus antenas y su anatomía para no confundirlas con los colibríes de verdad.
Lo más sorprendente de todas estas semejanzas, es que ninguna de las dos especies comparte el mismo continente, ya que solo podemos apreciar a estas aves en el continente americano.